El torneo entre colegios los tenía a todos alborotados. Los amigos de Aknamkanon estaban reunidos en su habitación y todos tenían sus decks con ellos.
—Podemos tener duelos entre nosotros como práctica —propuso Mokoto Jonouchi.
—No —dijo Hayato Honda—. Si no, todos sabremos las estrategias de todos. Sería muy aburrido.
—Tiene razón, dejemos para enfrentarnos la semana que viene en el colegio. —Añadió el egipcio—; ahora podríamos entrenar con un deck diferente, por si alguien tiene dudas de las pautas para construir un buen deck.
Todos estuvieron de acuerdo así que
asintieron satisfechos.
Miku Muto que estaba en silencio viendo el celular, se puso de pie.
—Chicos, tengo que irme ahora. Quede con una amiga —. Todos miraron extrañados a la enanita.
—¿Nos estás traicionando? —preguntó Mei Otogi en broma.
—Megumi Sama me invitó a entrenar con ella.
Todos hicieron un silencio incómodo, porque a ninguno le caía bien la hija de Seto Kaiba.
—No la llames así. ¿Eres su perrito? —preguntó molesta Izumi. —Esa chica es mala y seguro quiere aprenderse tus estrategias para derrotarte con facilidad.
—No es verdad. Conmigo siempre han sido amables los gemelos Kaiba. Tal vez porque nuestros padres son socios. Pero aún así, siendo no tan buenos aveces. ¿Qué los hace a ustedes más buenos?
Ninguno contestó y Miku prosiguió.
—Se que me ven como una niña y por eso no me toman en cuenta en nada. No son tan buenos amigos realmente, no conmigo —dijo resentida y se fue de allí dejando a todos boquiabiertos.
—Tiene razón —dijo Makoto—. Como nuestras clases terminan antes, salimos a divertirnos sin Miku. ¡Eso esta mal! ¿No deberíamos cambiar eso?
Todos hicieron silencio y miraron al rubio arrepentidos por haber dejado de lado a su pequeña amiga.
—Podemos mostrar que de verdad nos importa, si la invitamos para salir mañana al lugar que más le guste. —Propuso el hijo del faraón.
Todos acordaron que eso harían y el egipcio volvió a hablar:
—Chicos, hay algo que necesito saber. Como nos mudamos hace poco, no tengo idea de muchas cosas de aquí —dijo Aknamkanon.
—¿Qué quieres saber? —preguntó Hayato curioso.
—Cuéntenme sobre la familia de Seto Kaiba.
Todos se miraron pensando por donde empezar con el relato.
—Ok, yo te cuento —dijo Izumi—. Kaiba tiene cuatro hijos. Tu conoces a la mayor, Amunet Kaiba, la hija de Ishizu. Con su esposa actual tiene a los gemelos, Seto Jr y Megumi. Luego está el menor de nombre Ren que va a la escuela primaria con el hermano menor de Miku y con su prima Maya, la única hija de Mokuba Kaiba.
Cuando la rubia terminó de hablar Aknam preguntó algo extrañado:
—¿Seto y Megumi son gemelos? No se parecen y además ella esta una clase atras de él. No parece la clase de chica que recursa. —El estaba muy confundido.
—Nosotros los conocemos desde niños. Créeme que en la escuela primaria eran idénticos, pero con el paso del tiempo y al ser de distinto sexo ya no se parecen tanto. Y sobre la edad, Seto es un año menor que tú. Se adelantó un año para compartir clases con el hijo de Pegasus. Esos dos son mejores amigos desde niños —dijo Mei Otogi.
—Te contaré algo que pasó hace dos años —dijo Makoto Jonouchi y empezó a contar:
Flashback
Makoto y Hayato terminaron las prácticas con el equipo de fútbol y fueron a los vestidores a cambiarse los uniformes por la ropa de calle.
La puerta se cerró de golpe y no dieron importancia hasta que algo les llemo la atención:
Una serpiente verde arrastrándose por el suelo.
El susto fue tal que empezaron a gritar y corrieron hasta la puerta intentando abrir y nada, estaba cerrada con lleve. Lo curioso es que la llave solo la tiene el conserje.
—¡Abran! —gritaron muertos del miedo al ver al reptil acercarse peligrosamente.
Pero las risas del otro lado de la puerta no se dejaron esperar. Sin duda solo había un grupo capaz de algo tan perverso: "The powerful".
—Maldita sea, oigo sus risas. ¡Abran desgraciados! Kaiba, tú risa se oye más ¿eres idiota?¿quieres matarnos?—El chico ni se dio por aludido y siguió riendo muy divertido del otro lado.
—Tranquilo cachorrito feroz. ¡Si te muerde se morirá ella del asco! —dijo el castaño de catorce años para luego reír de forma infantil.
—¡Maldito idiota! ¡Abre de una vez! —dijo esta vez Hayato—. ¿Cómo tienen la llave?
—Le pagamos al conserje para que nos la prestara un ratito. —Esta vez fue la voz de Maximiliano.
La serpiente se acercó más y se puso en posición amenazadora. Con cuidado Hayato tomo una escoba para defenderse y a Makoto también.
Pronto la puerta se abrió y los tres chicos estaban ahí muertos de la risa.
—¿Qué les pasa malditos sádicos? —preguntó el rubio muy molesto y se lanzo para darle un puñetazo en el rostro al engendro de Kaiba.
Rápidamente Maxi le agarró la mano frenandolo y con un movimiento rápido lo tiró al suelo.
—Nadie toca a Seto chan si yo estoy presente ¿oíste imbecil? —dijo el de cabello blanco.
Makoto se puso de pie y junto a Hayato se miraron muy perturbados por la horrible experiencia. Esos chicos eran sin duda unos monstruos.
—Es inofensiva —dijo James von Schroider acercándose a la serpiente y dejando que le subiera por el brazo—. No es venenosa.
Las dos víctimas quedaron muy impactadas mientras escuchaban las risas burlonas y exageradas de los tres abusivos del colegio. No importaba que no fuera venenosa, ese chiste fue macabro y de mal gusto.
Los ricachones se fueron diciendo algo de espiar en el baño de las chicas.
Fin del flashback
—Esa es la verdad. Megumi sera vanidosa, presumida y tan parecida a su padre que da miedo, pero su hermano... Seto Jr es perverso y para empeorar las cosas siempre pone cara de inocente y sonríe agradablemente cuando en realidad es un patán de cuarta haciéndose el bueno.
Aknamkanon y Berenice se miraron un poco pensativos. Por el relato contado, ese grupo de tres eran una verdadera molestia en el colegio.
Apartamento de Maxi:
—Tenemos que ir a esa fiesta en Milano esta noche —dijo Maximiliano Crawford.
James asintió con la cabeza en modo de aprobación mientras leía un libro de medicina.
—Chicos, van a tener que ir sin mi.
Ambos miraron Seto Jr extrañados, ya que es el ama las fiestas.
—¿Por qué? —preguntaron a la vez sus amigos.
—Porque mi padre esta en China y me pidió que viajara a Corea a representarlo en una reunión de negocios.
—Pero puedes no ir a la reunión en modo de protesta. ¿Recuerdas todas las veces que prometió estar para ti y termino llendo a otra reunión de negocios? Como cuando ganaste un campeonato mundial de Mortal Kombat y no estuvo en las finales, o cuando te dieron un reconocimiento por crear el videojuego de realidad virtual más vendido del mercado. El tampoco estuvo ahí y nunca aprecia lo que haces —terminó de decir el hijo de Pegasus viendo como el rostro de su amigo cambiaba de una sonrisa a una expresión de profundo dolor.
El jovencito castaño miro el piso recordando con tristeza esos feos momentos y muchos otros similares de su vida.
—Es mejor que no seas desobediente Kai chan —aconsejó el alemán de pelo rosa, poniendo una mano en la cabeza del japonés.
—No James, Maxi tiene razón. Debo tomar venganza o nunca se dara cuenta que no debe ser un mal padre. Hasta que no cambie no lo obedeceré en nada.
El hijo de Pegasus sonrió satisfecho por la decisión de su amigo. Estaba mucho más cerca de destruir Kaiba Corp.
—Ven. —El castaño se acercó a Maxi quien lo abrazó y acarició su cabello—. Yo si te valoro —le dijo con cariño al ojiazul, ya que a pesar de estarlo usando, lo amaba como a un hermano menor—. No estas solo.
En el domo Kaiba:
—¡Vamos Miku! Te gane en el segundo turno.
Megumi se quejó al notar que la hija de Yugi no había dado lo mejor de si por culpa de la timidez y la indecisión.
La castaña suspiro cansada. Tendría que ser dura con ella para obligarla a perder el miedo. De otra manera nunca podría demostrar lo buena duelista que era.
—Miku, tendremos otro duelo. Si pierdes no tienes derecho a participar en el torneo.
El miedo se apoderó de la más pequeña. Si aceptaba no podría participar en el torneo, no tenia forma de ganarle a su idola, ella en los duelos era despiadada y poderosa.
—No, yo quería... —Paso por su mente que tal vez era mejor no estar en ese torneo ni en ningún otro, no era tan buena.
—¿Y Miku? ¿Eso es todo? ¿No me enfrentarás para demostrar que vales algo? —la pequeña la miró apenada, no tenía el valor de intentarlo, sabía que perdería—. ¿Esos patanes que te molestaban en el colegio tenían razón? ¿Eres una perdedora sin personalidad? —Miku bajo la cabeza apenada—. ¡Responde!!!
La voz autoritaria y enojada de la castaña la hizo alzar la cabeza y se armó de valor para tomar su decisión.
Si no se arriesgaba nunca podría saber de que era capaz, si tal vez podría haber ganado.
—Acepto —dijo con valor y seguridad en su voz.
El duelo dio comienzo:
—¡Voy primero! —dijo la hija de Kaiba—. pongo dos cartas y activo reglas antiguas para invocar de modo especial al dragón blanco de ojos azules. —Sonrió triunfante y prosiguió relatando cada movimiento—. Para finalizar equipo a jinete de los vientos de tormenta a mi dragón blanco. Tu turno Miku.
—Pongo una carta boca abajo e invoco Maha Vailo en modo de ataque. Le equipo hacha del desespero. —El monstruo recibe 1000 de ataque quedando en 3050—. ¡Ataca al dragón blanco!!!
—Activo a mi carta boca abajo, controlador de enemigos, para cambiar a Maha Vailo a defensa.
—Activo mi carta boca abajo, exorcismo, para destruir tu carta mágica —contraatacó la tricolor.
Megumi activó su otra carta boca abajo.
—Usare vigilancia del campeón para frenar eso.
Maha Vailo cambia a defensa por efecto de controlador de enemigos y Miku termina su turno.
—¡Mi turno! pongo una carta boca abajo e invoca Dragón de Alexandrita (2000Atk).
¡Ataca mi dragón blanco! —Destruye a Maha Vailo y deja a Miku con 1600 puntos de vida menos.
—¿Como es posible? Mi monstruo estaba en defensa —preguntó la más baja diciéndole adiós al torneo en su mente.
—Mi dragón esta equipado con mi jinete, esto hace que al atacar a monstruos en defensa causé daño de penetración —explicó con tranquilidad—. Lo siento chibi, dile adiós al torneo. ¡Dragón de Alexandrita! ¡Ataca directo a sus puntos de vida!
—No... solo me quedan 400 puntos de vida —dijo apenada la más joven.
—¿Qué harás? ¿Te rendirás como una cobarde? —preguntó la chica de ojos azules y la hija de Yugi subió el rostro para mirarla a los ojos.
—¡Nunca! ¡No quiero ser una tonta! ¡No me rendiré! —Megumi sonrió complacida ante el cambio de actitud—. Pongo una carta boca abajo y un monstruo boca abajo tambié. Activo a llamada de lo condenados desde mi mano, para traer a Maha Vailo de nuevo al campo. Le equipo Vara descartable para darle 800 más de ataque y esto activa su efecto quedando en 3350 de ataque finalmente. Terminó mi turno.
—Invoco a Kaibaman y activo su efecto: lo envió al cementerio para invocar de modo especial otro dragón blanco desde mi mano. ¡Ataca Dragón de alexandrita! a la carta boca abajo! —Esta resultó ser marshmallon y la castaña recibió 1000 de daño a sus puntos de vida—. Bien pensando Miku. ¡Pero esta vez no te salvarás! ¡Ataca Dragón blanco, con jinete de los vientos de tormenta! —para así causar daño de penetración, pero Miku contraatacó.
—Activo el efecto de esfera kuriboh desde su mano, lo mando al cementerio y freno tu ataque. Además activo libro de la luna para poner boca abajo a marshmallon.
—Bien, termina mi turno. Lo estas asiendo demasiado bien. —Sonrió la mayor haciendo que Miku se sintiera verdaderamente feliz.
—¡Bien! ¡Voy a ganar para estar en ese torneo! Invoco otro marshmallon en defensa boca arriba y activa gafas de marshmallon y esto hace que tus monstruos solo puedan atacarlo a el. ¡Equipo a Maha Vailo con colgante negro quedando en 3850 de ataque. Pero por su efecto sube a 4350! ¡Ataca al dragón blanco equipado con Jinete! Así evitar de una vez por todas sus daños de penetración.
—¡No tan rápido Miku! ¡Activo Pared de disrupcion! cada monstruo tuyo pierde 800 por cada monstruo que controles, ¡eso es 1600! ¡Ataca Dragón Blanco de ojos azules! —Maha Vailo queda en 2750 y es destruido por el dragón blanco. Miku pierde 250 de vida quedando en 150Lp.
Miku hizo silencio pensando en si sentirse feliz por haberce esforzado tanto o triste por estar a punto de perder.
—Mi señora, tenemos un problema. —Un hombre alto de cabello negro y barba (el guardaespaldas de Megumi) las interrumpió.
—¿No ves que estoy en un duelo Mamoru? —preguntó indignada la castaña.
—Si pero su hermano tendría que estar en pocas horas llegando a Corea. Y en su lugar esta viajando a Europa con los señores Crawford y Schroeder.
El rostro de Megumi se convirtió en uno sombrío cargado de enojo.
—¡Resultó ser más desconsiderado de lo que pensaba! —Megumi puso la mano sobre su deck—. ¡Me rindo Miku, tu ganas!
—¡No! —grito Miku, pero la chica ya estaba abandonando el lugar.
—Nos enfrentaremos en el torneo. Nos vemos chibi. —La hija del empresario se despidió y se marcho dejandola sola.
Miku sonrió feliz. De verdad admiraba tanto a esa chica, era su ejemplo a seguir.